Una moneda de colección en numismática es una pieza de moneda que va más allá de su valor nominal y se valora por su singularidad, belleza, historia y relevancia cultural. Estas monedas suelen ser emitidas con propósitos conmemorativos para celebrar eventos importantes, personas destacadas o hitos históricos. A diferencia de las monedas de curso legal las monedas de colección son buscadas por coleccionistas debido a su rareza, valor y atractivo estético.
El valor de una moneda de colección está determinado por varios factores, como su rareza, su condición de conservación, la demanda del mercado y su relevancia histórica o cultural. Las emisiones limitadas o las piezas únicas suelen ser altamente valoradas, especialmente si están en buenas condiciones. Además, la calidad del grabado y el diseño también influyen en su valor.
En resumen, una moneda de colección en numismática es una pieza especial. Su valor va más allá de su denominación monetaria, convirtiéndola en un objeto de aprecio por lo cuál no deben de ser mal gastadas o mal vendidas.